lunes, 21 de febrero de 2011

Mañana

Voy a ser grande
voy a ser nueva.
Quizás por ese entonces
no te recuerde tanto.
Quizás me olvide
quizás me pierda
quizás te sienta
de vez en cuando.
Voy a ser limpia
voy a ser loca.
Sentiré a veces
que tu me tocas.
Te habré olvidado
te habré vendido
habré desangrado
por los rincones.
Habré llorado
un tiempo antes.
Habré esperado
que tu me llames.
Habré muerto
luego renacido.
Me habré peleado
con los amores.
Habré descreído
y habré pensado
que de nuevo nadie
amarme podría.
Te habré buscado
y encontrado distinto
decepcionado un poco
de los caminos.
Habré gritado, seguramente
llamando tanto la atención.
Me habré golpeado
mil veces
cual demente
con la amarga decepción.
Habré reido
¡Qué joder!
Habré llorado,
cataratas.
Te habré buscado
¡Por todas partes!
Recordando este día
recordando este momento
en el que fuiste amado.

viernes, 11 de febrero de 2011

Confesión

Estábamos tomando mate. Me acuerdo que estabamos tomando mate porque me molestaba pensar que después me iba a quedar el gustito ese, medio campestre. No es que no me guste, pero no era nada romántico. Había unos twistos medio vacíos en la mesa, arriba del diario que releías.

Estábamos hablando de boludeces, que seguramente en ese momento serían muy importantes. Estábamos mirándonos de vez en cuando. Cuando el otro no miraba, se escapaba un vistazo rápido, fugaz. Es que por lo menos yo no quería que te asustaras.

Estabamos pensando, pensando quizás de más. En el otro. En cómo leía la noticia, cómo comía los twistos, cómo cebaba mate, cómo apoyaba la mano sobre la mesa, cómo se sentaba.

Estábamos leyendo las noticias, comiendo twistos, cebando mate, apoyando las manos en la mesa, sentándonos, bien juntitos, cuando yo te amé.
Por qué no te lo dije, mierda?!